miércoles, 7 de marzo de 2012

Reclamo de Vecinos


Recibimos varias denuncias de vecinos a través de mensajes de textos donde nos pedían que tratemos varios tema.

Hoy… OLORES NAUSEABUNDOS

En el barrio comprendido por las calles córdoba, 17 de Octubre (ex - Mendoza), 3 de febrero y San Luis, desde hace mas de 10 años existe una empresa que causa incomodidades a todos los vecinos.

Ésta empresa derrite grasa, muele huesos, etc. Causando olores nauseabundos a toda hora.
Desde sus inicios los vecinos reclamaron a las autoridades una solución, pero nada obtuvieron, ninguna respuesta de ningún secretario o intendente.
Al no existir la oficina de medio ambiente municipal se fueron trabando los reclamos pertinentes.
Conversando con los vecinos nos describieron sus experiencias

GR -¿Cómo es vivir en éste barrio?
V-Si lavas ropa no podes tenderla porque el olor se te impregna y a demás te queda grasosa.
GR-En la pileta de lona que usábamos para refrescarnos quedaba una capa de aproximadamente 5 cm de grasa de un día para el otro.
V-No podemos disfrutar del patio o la vereda, el olor es muy fuerte tenemos que vivir siempre adentro con todo cerrado.
V- te das cuenta de quien trabaja allí por el olor que tienen, se le impregna en la piel, es desagradable a tal punto que en los comercios los atienden primero a ellos para que no quede el olor dentro.

GR -¿Hicieron denuncias? ¿Dónde?
V-En la municipalidad hace mucho tiempo, mucho antes que entre Murabito, me acuerdo que vino en una oportunidad una chica asistente social o un titulo similar recorrió el barrio y nos dijo que esa empresa debía mudarse en unos meses. Pasaron mas de 8 años y no obtuvimos respuesta alguna. La empresa sigue acá.

GR -¿Hablaron con el dueño de la grasería?
V- si muchas veces pero es agresivo.
V-Lo máximo que obtuvimos es que trabaje de noche, por un lado mejor porque disminuye el olor de día pero… los ruidos son terribles, las casas tiemblan, parecen que te pasa un tren por encima.

Datos:
Los olores del barrio son realmente nauseabundos a los que hay que agregarle los olores que vienen de Swift, el olor del agua estancada de los cordones cunetas, la basura acumulada en las esquinas esperando que alguien en algún momento la retire.
Los vecinos viven encerrados en sus casas como prisioneros, ¿prisioneros de un empresario o de una ciudad que les da la espalda?
Éstas son las consecuencias cuando se dejan instalar empresas para obtener puestos de trabajos sin medir las consecuencias. Las reglamentaciones como filtros en las chimeneas, zonas industriales, etc. deberían ser estudiadas por cada gobierno, para una mejor convivencia.

Pero si hablamos de olores no debemos olvidarnos del barrio Cancha de Remos mas precisamente por calle soldado Aguirre que desde hace años funciona una empresa de alimentos balanceados que también emana olores por momentos repugnantes. Allí también debemos sumar los microbasurales, la cercanía del basural Municipal y el arroyo Saladillo.

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