sábado, 25 de junio de 2011

CUENTO FOLKLORICO



El Silencio de los Inocentes
 
¡Piquete piquete! Pan y trabajo o todo al carajo se escuchaban en las calles a cientos de personas reclamar lo mínimo para su sobrevivencia.
Llegó la policía intentaron desarmar el disturbio, pero había muchos menores de edad sentados en la ruta entre el humo de las gomas.
Pun pun pun pun retumbaban los tambores desde las 5 am en la plaza principal por la protesta de los recolectores de residuos.
Cerrá, cerrá que no salga nadie hasta que no nos den lo que pedimos, pone candado. El concejo deliberante se vio sorprendido por un grupo de personas que pusieron candado a las puertas impidiendo que los ediles salgan del recinto, su reclamo eran los terrenos que habían usurpado hacía unos meses.
Muchos fuegos cruzados en la misma mañana dijo el intendente municipal, que el secretario vaya a la ruta y despeje el paso para que todos puedan ir a trabajar.
Que el sub secretario corra a la plaza que con tanto ruido nadie puede vivir.
Que el coordinador del sub secretario vaya al concejo y me informe como marcha el problema por aquellos lados.
Volvió el secretario e informo el estado del piquete: -para solucionar este conflicto debemos llevar bolsones, planes y terrenos sociales a éstas 35 personas.
Bueno dijo el intendente, vamos a darles eso y una plaza para que los niños jueguen, no nos olvidemos que estamos cerca de las elecciones.
Luego volvió el subsecretario de hablar con los trabajadores que estaban realizando un paro.
Hay 50 obreros contratados que piden que se les pague los $200 que se le deben y los sueldos de estos meses, subir a categoría 700, ropa, bolsones, seguro, un camión nuevo, colonia, desinfectantes, vacunas antitetánica, y anteojos de sol.
No, no, no, eso es mucho exclamó el intendente solo le daremos los $200 y guantes, cerca de las elecciones prometemos categorías y les ponemos las vacunas, creo ganaremos 50 votos.
Cuando llega el coordinador del concejo informa Sr. Intendente son 20 familias que reclaman terrenos sociales que ya usurparon y que ahora piden ayuda, porque allí, no tienen agua, ni luz, y tampoco pasa el colectivo.
Bueno llama a los concejales que firmen las escrituras.
Mientras se producían éstos debates en la cocina de la intendencia, el coordinador de coordinadores entró a buscar un vaso de agua diciendo –cerca de aquí hay un balcón a punto de caer, tenemos 5 vecinos que reclaman y están muy preocupados, piden que se lo apuntale nos escribieron una nota.
Bueno dijo el intendente veremos si se suman mas vecinos al reclamo.
Un concejal que por ahí pasaba exclamo muy seguro –aún no hay una ordenanza para los balcones de la ciudad ¿no sabia que ya había balcones aquí?
El sub secretario intervino y dijo –ojo el balcón fue construido por el amigo del primo del ex teniente mayor del 4º comando del ejército peronista.
Bueno bueno… el balcón puede esperar total son 5 votos, dijeron todos.
A los 3 días golpea a la puerta del despacho del intendente el coordinador de jefes de brazos caídos con una nota de los vecinos que pedían poder circular por la vereda en forma segura.
El intendente miró la carta y dijo -decile al secretario de inspección técnica que chequee el estado del balcón, luego si éste se está por caer que derive a la secretaria de obras viejas privadas para que le avisen al propietario que repare el balcón. Dejen pasar una semana y que vuelva el secretario de inspección técnica para que verifique si se realizó el arreglo pertinente y notifique a quien corresponda es decir si todo esta bien…nota al intendente para que visite a los 5 vecinos para invitarlos a seguir con la gestión que los escucho, si el balcón aun no se arregló vuelvan con obras viejas privadas para que llamen al secretario de obras al paso para que vea la forma de solucionarlo junto al secretario de catástrofes cotidianas barriales.
El coordinador de jefes de brazos caídos se retira muy mareado del despacho a cumplir con las tareas encomendadas.
Como en esos días había un feriado largo, unos días de lluvia y los 3 días de vacaciones que le debían al secretario de inspección técnica el pedido del intendente se demoró varias semanas.
En esos días hubo un terremoto en San Juan que repercutió suavemente en el balcón en conflicto cayéndose sobre unos angelitos que salían del jardín.
 
Los conflictos que demandaban atención por los cortes y quemas de gomas pudieron más que el Silencio de los Inocentes.

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