Editorial

Si buscamos un titular para nuestra ciudad podríamos decir

Entre Fuegos


Fuegos cruzados pre-electorales que nos atacan en cada esquina. La ciudad se ve colmada de pequeños fuegos que incendian a todos, que cuando se unen se convierten en un fogata ardiente.
¿Pero ese fuego es real?
En campaña electoral como diría un conocido político Villagalvense “Todas las vacas son negras” y al ser negras se confunden con el humo, con la noche, con las alucinaciones.
Fuegos cruzados donde nadie lo enciende pero todos lo avivan
¿A quién le conviene incendiar la ciudad?, podríamos decir que solo a ineptos e inescrupulosos, quienes no respetan nuestra amada ciudad.
En ésta época donde el “Vale todo “ está a la orden del día, las paredes se verán llenas de pegatinas o pintadas, las calles alfombradas de volantes que taparan los desagües de las esquinas, y hasta el cielo taparán con pasacalles multicolor que cuelgan en forma indiscriminadas. Pero “…queremos una ciudad más limpia…” solo discursos políticos ya que en la práctica solo vemos lo contrario.
Fuegos cruzados entre familiares, ex amigos, ex parejas y vaya uno a saber que más…. Pero llamen a los bomberos y apaguen el fuego aquí hay una ciudad que quiere ser respetada por TODOS.
Demuestren que verdaderamente pueden ser nuestros gobernantes y comiencen por respetarse ustedes mismos, dejen de dar el papel lastimoso con el que arrancaron algunos la campaña y muestren su verdadero potencial. Campaña política con inteligencia, con capacidad.
Fuegos cruzados
Remiseros contra concejo, recolectores contra intendente, todos contra la ciudad, todos contra todos.
Verdaderos Fuegos como dice Galeano en su libro de los Abrazos:
...”-El mundo es eso -reveló- un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás.
No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tanta pasión que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca se enciende…”
 
Seamos verdaderos fuegos y brillemos para ser luz, no para provocar incendios.
 
 
 

 Nanci Zappalá